La fruta preferida de los perfumistas…

El nombre italiano, «bergamotto» es una modificación de la palabra turca «bey armudu», que significa «pera del Bey«.

El Bergamoto es un árbol de la familia de las Rutáceas, de hoja perenne que pertenece al grupo de los cítricos y florece en primavera. El bergamoto no crece silvestre ni a partir de una semilla es el resultado del injerto del limero y naranjo amargo, formándose el híbrido bergamoto (Citrus bergamia), originario de Persia.

Alcanza entre 4 y 5 metros de altura. Tiene el tronco liso, es ramoso, con la copa abierta. Las hojas son alternas, aovadas, persistentes, aserradas, duras y lustrosas. Sus flores son blancas, pequeñas y olorosas.

Su fruto es la bergamota que tiene forma esferoidal aplanada y de unos 5 cm de diámetro, pulpa verdosa, dividida en gajos, de sabor agridulce. La corteza  es lisa y amarilla y, al igual que las naranjas, contiene vesículas llenas de aceites esenciales muy apreciados en perfumería.

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Estos árboles crecen bien en climas templados y en terrenos orientados hacia el sur, a cubierto de los fríos vientos del norte. Su microclima ideal se halla en una estrecha franja de tierra que bordea el extremo sur de la Italia continental. Aunque se ha intentado cultivar bergamotos en otros lugares, un elevado porcentaje de la producción mundial procede de la provincia de Reggio. Desconocido en la mayor parte del mundo, donde mejor se le aprecia es en Italia; ahí se utiliza para bajar la fiebre y combatir el paludismo. Los italianos la ingerían con objeto de expulsar las lombrices intestinales. Diversas fuentes históricas indican que en Calabria se cultivaban bergamotas al menos desde principios del siglo XVIII (El primer campo de bergamotos se plantó en Reggio di Calabria alrededor de 1750); su cultivo corrió paralelo al éxito del agua de colonia. Resulta que, en 1704, Gian Paolo Feminis, un italiano establecido en Alemania, empezó a comercializar un líquido perfumado al que llamó Aqua admirabilis cuyo principal ingrediente era la esencia de bergamota. Esta sustancia perfumada llegó a conocerse como agua de colonia, o colonia sin más, en honor de la ciudad alemana donde se produjo.

Para obtener dicho aceite, antiguamente se cortaba la fruta en dos, se le quitaba la pulpa y se exprimían las cáscaras de tal modo que las gotitas de esencia que salían disparadas de su capa externa impregnaran unas esponjas. Con este sistema se precisaban 100 kilos de bergamotas para conseguir medio kilo de esencia. En la actualidad el aceite se obtiene a presión fría de las cáscaras de frutos maduros con máquinas que rallan la corteza de las frutas enteras con discos o rodillos abrasivos. Este es de apariencia incolora a verde pálido, siendo muy aromática: dulce, frutal y fresca. Este aceite no debe usarse al aire libre, bajo la luz del sol porque contiene bergaptena que aumenta la sensibilidad de la piel a los rayos solares ultravioletas, produciendo pigmentación y quemaduras.

Los analistas han aislado unos 350componentes en la esencia de bergamota, lo que explica su peculiar fragancia y sus numerosas propiedades.

Las propiedades generales de este aceite son:

Es un buen antidepresivo; estimula, normaliza el sistema nervioso, refuerza la confianza en sí mismo. Refresca y levanta el espíritu. Ayuda a superar sentimientos de soledad, tristeza y dolor.

Es un potente desinfectante de las vías urinarias y un aceite valioso para personas que sufren de cistitis, irritación vaginal, leucorrea

Es un buen antiséptico se utiliza para combatir los síntomas de resfriados, gripe y dolor de garganta, anginas, bronquitis, catarro, tos seca y dolorosa, tuberculosis, acelera la cicatrización y minimiza las molestias causadas por ulceraciones y varicela, sarampión y también como repelente de insectos y calma sus picaduras. Además, por sus propiedades antisépticas y bactericidas, la industria farmacéutica la incluye en desinfectantes empleados en cirugía, oftalmología y dermatología. Por su parte, la pectina de bergamota se utiliza en preparados hemostáticos y antidiarreicos debido a sus poderosas propiedades gelatinizantes.

Ideal para tratamientos de acné y las infecciones de la piel, ayuda a regular la grasa excesiva de la piel y el cuero cabelludo en compresas contribuye a disminuir la inflamación de los forúnculos y favorece su pronta cicatrización. Como facilita el bronceado, la esencia de bergamota forma parte de diversos cosméticos (En el pasado, el psoraleno, un compuesto extraído del aceite de bergamota, se utilizaba en cremas para acelerar el bronceado y en protectores solares. Esta sustancia penetra en la piel y aumenta los daños en el ADN de las células. Este daño es el responsable de quemaduras solares y de un incremento de la producción de melanina. Estas sustancias fotocarcinogénicas fueron prohibidas después de que hubiesen producido muchos casos de melanomas malignos y muertes.[] El psoraleno ahora sólo se usa en el tratamiento de ciertos desórdenes de la piel, como parte de la terapia PUVA)

En alimentación el aceite esencial extraído de la piel de esta fruta amarga se usa como aromatizante de las variedades de té Earl Grey y Lady Grey, y en confitería, para dar sabor a helados, infusiones, golosinas, postres y bebidas Una empresa denominada Caffé Sicilia sita en Noto, Siracusa, Sicilia, produce una mermelada usando este fruto como su principal ingrediente.También es usado en Grecia como conserva, preparada con la piel de la bergamota hervida en almíbar.

Como esencia la piel de la bergamota se usa en perfumería por su capacidad para combinar con una amplia gama de esencias para formar distintas mezclas que hacen que sus componentes se complementen entre sí. Para los perfumistas, la fruta del bergamoto tiene características singulares, posee la rara capacidad de “amalgamar y fijar aromas diferentes, fundiéndolos en una única fragancia, y de aportar una nota de frescura especial a cada combinación”. Aproximadamente un tercio de todos los perfumes de hombre y la mitad de los de mujer contienen aceite esencial de bergamota.

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