Los helicrisos son un género conocido desde la antigüedad. La palabra helichrysum deriva del griego “helios” (sol) y “chrysos” (oro) en referencia al color brillante y dorado de las flores de este género. Endémicas de la cuenca mediterránea, su periodo de floración se prolonga desde mediados de primavera hasta principios de verano. Sus flores tardan mucho tiempo en marchitarse, de ahí su nombre común de «siempreviva-inmortal-eterna- perpetua». Es una planta de unos 10-50 cm de altura . La podemos encontrar durante todo el año, aunque florece sobre el mes de julio, y son precisamente sus capítulos amarillos, de olor suave y sabor un poco amargo en forma de ramilletes, las que se usan para los fines terapéuticos.
De las cerca de 500 especies de helicrisos, sólo un reducido número de ellas sintetizan una cantidad de esencia que se pueda extraer y utilizarse en terapéutica (Helichrysum stoechas, Helichrysum angustifolium, Helichrysum gymnocephalum, Helichrysum italicum).
Esta foto es de Helichrysum stoechas; sus flores en infusión tienen propiedades febrífugas y pectorales. Externamemte tambíén aplicada en forma de lavados se ha venido usando para tratar dermatitis, micosis y conjuntivitis. Cortada y seca se emplea en la composición de detalles florales.

Ya que estamos , decir que la especie más empleada en fitoterapia y aromaterapia no es esta es Helichrysum italicum, se parecen mucho, pero no es la misma planta, a veces es bastante difícil diferenciarlas, la Italicum florece normalmente entre abril-mayo, mientras que la Helichrysum stoechas florece entre junio-julio. La Italicum presenta tallos algo más verdosos.
El aceite esencial de Helichrysum italicum es un potente antimicrobiano, antibacteriano y antifúngico, lo que hace que obtenga resultados muy buenos cuando se aplica por vía tópica para cualquier dermatitis, así como para evitar la proliferación de las bacterias que puedan aparecer con el rascado
Tradicionalmente se le atribuye a la planta Helicriso unas propiedades extras como antialérgicas, digestivas y hepatoprotectoras; el Helicriso en su conjunto utilizado en infusión, extracto o en jarabes es un potente antihistamínico con resultados muy positivos tanto para las alergias que afectan a la piel, como para las que producen rinitis, mucosidad y picor. A todo esto hay que sumarle, que el Helicriso es capaz de estimular la secreción propia de nuestro organismo de hidrocortisona, lo que potenciará todavía más sus propiedades contra las alergias.