La Hierba de San Roberto – Zangogorria – Geranium robertianum es planta herbácea anual o bienal, dotada de un tallo velloso, ramificado, en el cual se insertan hojas alternas de color verde y tonalidades rojizas. Sus flores de color rosa se elevan en parejas, gracias a la presencia de largos pedúnculos y florecen a partir del mes de abril. Crece en cualquier rincón sombrío y húmedo, si nos fijamos la encontraremos en muchísimos sitios. Al estrujarla se aprecia un característico olor bastante desagradable.

Los tallos y las hojas de esta planta contienen taninos en elevada concentración, hasta un 35%, ácidos orgánicos como el ácido málico o el ácido cítrico, principios amargos (geraniína) y su aceite esencial contiene geraniol, citronelal, linalol y terpineol.
Los taninos confieren a la planta una propiedades astringentes, hemostáticas y diuréticas. Se ha usado tradicionalmente como antidiarreico en diarreas leves y hemostático local. El aceite esencial tiene un efecto analgésico y antiséptico.
La hierba de San Roberto es una planta popularmente muy usada vía tópica, se aplican directamente las hojas frescas, lavadas y machacadas e incluso se venda con gasas, se preparan decocciones con las hojas e incluso con la planta entera que se aplican en cataplasmas para curar heridas y ulceraciones dérmicas, bucales o corneales, blefaroconjuntivitis, estomatitis, aftas bucales, faringitis…también se preparan macerados y té de hierba para gargarismos o para aplicar directamente sobre heridas.
