La zarzaparrilla o zarza morisca – arkasats, endalar (Smilax aspera) es una planta enredadera que puede alcanzar unos 15 metros de longitud. Sus ramas espinosas se agarran y prosperan en el ramaje de los árboles o medran en capas arbustivas. Las hojas son redondeadas y acorazonadas y las flores pequeñas y numerosas agrupadas en umbelas axilares. El fruto es una baya redondeada, roja oscura y de color negro cuando madura, forman racimos como los de las uvas.

La zarzaparrilla europea (Smilax aspera ) es muy común en bosques, setos y zonas arbustivas. Esta especie europea no tiene tanta capacidad depurativa como las zarzaparrillas de la América tropical, que son las que se suelen usar en la fitoterapia moderna ; la mayoría se encuentran en América del Norte y del Sur, las más apreciadas en farmacopea son las de México.
La droga vegetal la constituye la raíz de Smilax S. aspera que contiene entre otros saponósidos triterpénicos como la sarsasapogenina y esmilagenina, aceite esencial, almidón, colina, sales minerales, sobre todo potásicas, taninos y fitosteroles: (estigmasterol, beta-sitostero).
Tradicionalmente se ha utilizado como diurética y sudorífica. Popularmente se prepara en infusiones combinada con otras plantas depurativas, como la bardana, el diente de león como depurqtiva, para limpiar impurezas de la piel e incluso en resfriados y gripes.

A día de hoy la Comisión E desaconseja su administración al considerar insuficientemente probadas sus indicaciones terapéuticas y ante el posible riesgo de su uso. La ingesta de preparados de zarzaparrilla puede producir irritación gástrica y un aumento temporal de la diuresis. Además puede producir interacciones medicamentosas – se considera que puede puede interferir de forma incontrolada en la farmacocinética de otros medicamentos administrados simultáneamente.