Hoy vengo a hablaros de como la fitoterapia y las plantas medicinales nos pueden ayudar a combatir uno de los grandes males de nuestra sociedad actual como es la ansiedad, el estrés y todas las consecuencias que de ellas padecemos como es el insomnio y la depresión.
Una sociedad que trabaja a marchas forzadas, prisas, la cultura de lo inmediato, queremos estar en veinte sitios a la vez. Nos exigen y nos exigimos demasiado.
Todos estos males que nuestra sociedad venía arrastrando se han visto tremendamente acrecentados si cabe por el Covid. Si algo nos ha traído la pandemia, los confinamientos, la incertidumbre y el miedo son estados de nervios, ansiedad, fatiga, hastío y depresión.
Como dato os diré que la venta de plantas medicinales en establecimientos farmacéuticos se ha incrementado considerablemente (50%) durante la pandemia; sobre todo aquellas destinadas a reducir la ansiedad, el estrés o el insomnio.
Hoy vamos a hablar de plantas medicinales que nos ayudan a mitigar estas situaciones, pero antes de nada si algo cura el alma, el espíritu, la mente y el cuerpo, es sin duda la naturaleza. Yo desde tradionsilvestre siempre os lo digo que el contacto con la naturaleza es necesario y vital.
Respirar – deporte – naturaleza.
Todas las patologías de las que vamos a hablar hoy, ansiedad, insomnio, depresión requiere de un tratamiento a varios niveles – terapia, ayuda psicológica y farmacológica Importante decir que los que los fármacos empleados en sí no curan la enfermedad, nos ayudan a sobrellevarlas. Hablamos de ansiolíticos, hipnóticos y antidepresivos.
Estos fármacos si bien son muy eficaces llevan consigo que generan dependencia y a veces también son mal tolerados.
La fitoterapia juega un papel clave, es especialmente útil y eficaz.
Las plantas medicinales sedantes, tranquilizantes son totalmente seguras y no crean dependencia y son en general mejor toleradas.

Ansiedad, estrés, nerviosismo.
Un poco de estrés y ansiedad nos puede ayudar a afrontar y superar algunas situaciones difíciles, pero cuando no desaparecen y se cronifican los síntomas pueden interferir con las actividades diarias, como el desempeño en el trabajo, la escuela y las relaciones entre personas. Es importante diagnosticarlas y tratarlas a tiempo, porque si no suelen ir a mayores y puede empeorar con el tiempo y derivar en dolencias físicas y cuadros depresivos y ansiosos.
Plantas tranquilizantes y sedantes
La valeriana
La valeriana está indicada como sedante suave en casos de irritabilidad y excitabilidad nerviosa, acompañadas de alteraciones del sueño. Además posee acción espasmolítica y anticonvulsivante.
La Valeriana officinalis es una planta perteneciente a la familia de las Valerianaceae originaria del norte de Europa y Asia, hoy en día muy cultivada con fines medicinales en todo el mundo.
Vulgarmente apodada con el nombre de hierba de los gatos (una vez seca, de la raíz emana un olor penetrante, como de sudor de pies, debido a la hidrólisis de algunos de los componentes de su aceite esencial que liberan ácido isovalérico, que la tradición dice que excita y atrae a los gatos).
La valeriana era bien conocida en la época de la antigua Roma, y ya entonces se utilizaba como sedante. Valere, vocablo del que deriva su nombre valeriana, es un término latino que significa “estar bien”. En la Edad Media y durante el Renacimiento esta planta gozó de gran reputación en Europa como remedio para calmar los estados de histeria y los ataques de epilepsia, pero también era utilizada para el tratamiento de trastornos digestivos, con náuseas y vómitos, para tratar las úlceras bucales y las encías inflamadas e incluso la debilidad de la vista.
El potencial medicinal de la planta se concentra principalmente en sus partes ocultas, en el corto y grueso rizoma horizontal –o tallo subterráneo– y en sus raíces, que se cosechan al final del verano o principios de otoño.
La valeriana presenta unas sustancias conocidas como iridoides con estructuras muy próximas entre ellos y forman una mezcla difícil de separar. En conjunto reciben el nombre de valepotriatos, siendo los mayoritarios el valtrato y el isovaltrato. Son compuestos bastantes inestables que se encuentran únicamente en la planta fresca o cuando es deseca a temperaturas inferiores a 40 grados, se descomponen por acción del calor, la humedad o la acidez en baldrinales. Además en su composición encontramos también GABA ( ácido y- aminobutírico), glutamina, arginina y trazas taninos y alcaloides. Aún no se conoce con exactitud el mecanismo de acción, ni los componentes implicados en las mismas. Se piensa que todos sus componentes actúan de manera sinérgica. Recientes estudios apuntan a los receptores del GABA como los principales implicados en la actividad sedante e hipnótica de la valeriana. El acido valerénico actuaría como agonista de los receptores 5- HT de la serotonina y del GABA
La valeriana se revela así como una alternativa válida a los hipnóticos y sedantes de síntesis para conseguir favorecer el sueño natural en estados de insomnio no agudo, siempre y cuando la causa de esta dificultad para dormir sea por tensión nerviosa y acumulación de preocupaciones. Al final estar relajado en general y durante el día nos va a hacer llegar mejor al momento de dormir.
Los comprimidos o cápsulas son la forma más frecuente y cómoda de tomarla, que tienen una media de 250 o 300 mg por unidad, de las que se puede tomar en el caso de los adultos hasta 4 o 5 al día, la última toma una hora o dos antes de acostarse. La planta seca se presenta en forma de raíz seca estabilizada, que se puede preparar en decocción, preferentemente combinada con otras plantas como la melisa y el espino blanco, más el añadido ciertamente imprescindible de algún corrector de sabor, como la menta o el anís verde. Se pueden preparar infusiones 15- 20 gramos de raíz de valeriana por litro de agua. En cuanto a la dosis máxima en planta seca, se pueden tomar hasta tres tazas diarias en el caso de los adultos, y una o media en el de los niños.Se recomienda una dosis diaria para adultos de 1.5 a 2 g polvo o de planta de 1 a 3 g como infusión. Para aliviar la tensión nerviosa, inquietud e irritabilidad, la pauta posológica es e tres tomas / día. Para mejorar el sueño se tomaría una sola dosis media hora y dos horas antes de acostarse.
Para combatir el insomnio, se aconseja tomar una dosis a media tarde y la segunda una o dos horas antes de acostarse, dado que con frecuencia (aunque no a todo el mundo) produce cierta inquietud inicial que se va apagando con el paso del tiempo.
Ahora bien, para que resulte eficaz, se deben procurar tratamientos largos de entre 4 y 6 semanas y en dosis elevadas para quienes ya hayan seguido tratamientos previos con medicamentos.
La valeriana no presenta apenas efectos secundarios y es, en general, una planta segura y apta para todas las edades. Se metaboliza con bastante rapidez y sus efectos han desaparecido a la mañana siguiente.
Solo se desaconseja su consumo, por prudencia y a falta de estudios concluyentes, a mujeres embarazadas y lactantes, a niños menores de tres años y a pacientes con insuficiencia renal.
No obstante, consumida de forma persistente y en dosis demasiado altas, se ha observado que la valeriana puede ocasionar cefaleas, vértigos, náuseas, fatiga, sudoraciones, picores e incluso aquello que con ella se pretende combatir: alteraciones del sueño. Otros estudios hablan de somnolencia y torpeza. En cualquier caso, se aconseja no superar los 15 g de valeriana diarios en cualquiera de sus formas.
La melisa
La melisa (Melisa officinalis) también llamada toronjil o bálsamo de limón, es una planta aromática que pertenece a la familia de las labiadas. Es originaria de los países mediterráneos, pero cultivada en toda Europa y zonas templadas de América.
Su aroma es penetrante y recuerda al olor de la menta o el limón. Ya en el siglo XI el medico árabe Avicena decía de ella que alegraba y reconfortaba el corazón, es un equilibrador natural del sistema nervioso.
Esta indicada como sedante para reducir el estrés mental y para los problemas digestivos, pues puede calmar molestias gastrointestinales incluyendo la flatulencia o hinchazón. Sería la planta de elección para todas esas personas que tendemos, entre las que me incluyo a acumular los nervios en la boca del estómago. La famosa agua del Carmen, antigua fórmula de las Carmelitas, que aún sigue utilizándose para el malestar digestivo, no es sino un alcohol de melisa.
Las partes de la planta dotadas de actividad farmacológica son las hojas y en ocasiones la sumidad aérea. Contienen aceites esenciales con aldehídos monoterpénicos (citral, citronelal, neral, geranial) que son los que le proporcionan su particular aroma y sus propiedades sedantes, antiespasmódicas, carminativas y digestivas. En uso externo puede utilizarse para el tratamiento del herpes labial. Otros constituyentes de interés son los ácidos fenoles derivados del ácido cinámico (ácido cafeico, clorogénico y sobre rodo rosmarínico), triterpenos y glucósidos de monoterpenos.
Para prepararla en infusión se añade una cucharadita de melisa en una taza de agua caliente y deja reposar 10 minutos antes de colar y consumirla. La dosis recomendada es de 0.5 – 1 g al día de polvo de planta repartido en varias tomas/ 2-3 g de hoja desecada en infusión , 2-3 veces / día.
Aunque la melisa puede ser una planta milagrosa, hay ciertos casos en los que no se recomienda su uso para evitar complicaciones de salud. Las personas que padecen de hipotiroidismo deben evitar el consumo de esta planta, pues en muchos casos la melisa ha provocado efectos nocivos para la tiroides.
El espino albar
El espino albar (Crataegus Monogyna) es muy común observarlo por nuestra tierra, se trata de un arbusto espinoso de la familia de las Rosáceas que crece entre matorrales. Las flores crecen en ramilletes de color blanco y desprenden un olor muy agradable. Los frutos son bayas ovaladas y rojizas de color rojo brillante, redondeadas y con una sola semilla en su interior que maduran a finales de verano. Tienen forma de pequeñas manzanitas de color rojo, su sabor es bastante ácido, de hecho si los probamos tiene un cierto sabor a manzana. Por el fruto se le conoce también con el nombre de “manzanitas de pastor”.
Antaño se decía de él que fortalecía el corazón y calmaba los nervios.
En su composición encontramos flavonoides, derivados triterpénicos y aminas biógenas.
Las flores frescas son más efectivas que las secas, suelen tomarse en infusión al igual que los frutos. También encontraremos numerosos preparados fitoterápicos a partir del extracto seco. Es cardiotónico y antiarrímico, ayuda a aumentar la fuerza contráctil del corazón y regularizar du ritmo. Tiene un efecto cardioprotector frente a fenómenos de isquemia miocárdica. Es muy empleado el tratamiento de la insuficiencia cardiaca leve y en alteraciones del ritmo cardiaco que no requieran el uso de digitalicos. En todos los casos es muy importante prestar especial atención a la dosificación y hacerlo bajo control médico. A dosis muy elevadas puede producir bradicardia y depresión respiratoria.
También es un buen coadyuvante en el tratamiento de alteraciones nerviosas, nerviosismo, ansiedad o insomnio que cursan con taquicardias, sensación de opresión en el pecho, angustia y dificultad para respirar. Es una de las plantas ansiolíticas más eficaces que se conocen.. Lo encontraremos frecuentemente acompañando a otras plantas medicinales tranquilizantes y sedantes como la pasiflora, la valeriana o la melisa en números infusiones y cápsulas para facilitar el sueño o relajantes.
La tila
El tilo es un árbol de porte majestuoso cuyas hojas acorazonadas y asimétricas tienen los márgenes dentados. En Europa Occidental habitan tres especies de tilo: el de hoja grande (Tilia platyphyllos), el de hoja pequeña (Tilia cordata) de hojas menores y de color más oscuro y el tilo común, Tilia europea, un híbrido entre las dos especies, que es el que se planta en parques y plazas. Todas las especies tienen las mismas propiedades medicinales.
Las flores del tilo son muy muy aromáticas, pequeñas y amarillentas, y de estambres numerosos con un aroma suave y delicado que puede recordar a la miel. Las inflorescencias del tilo contienen entre otros mucílagos (10%), compuestos fenólicos: ácidos fenoles, proantocianidoles y especialmente flavonoides (1%), como quercitrósido, astragalósido, rutósido e hiperósido. En el aceite esencial encontramos geraniol, eugenol y farnesol.
Con fines medicinales se cosechan las flores y sus brácteas a los pocos días de su floración, que se suele producir entre junio y julio; también puede emplearse la corteza. La infusión de flores de tilo, la conocida tila se ha usado tradicionalmente como tranquilizante suave en estados nerviosos, calmante de la tos y sudorífico en el caso de estados febriles (asociado a saúco y limón se indica contra resfriados y en procesos gripales). Las infusiones de tila son también útiles para mediar en digestiones pesadas, acidez de estómago y gastritis, provocadas también por un exceso de nervios y por situaciones de estrés. El tilo presenta una ligera acción antiespasmódica sobre la vesícula biliar, facilita la expulsión de pequeños cálculos y previene el estreñimiento.
La Agencia Europea del Medicamento (EMA), aprueba su uso tradicional para el alivio sintomático del resfriado y como tranquilizante suave. Hasta el momento no existen datos de las acciones farmacológicas de las inflorescencias han sido poco investigadas.
Para terminar como curiosidad os diré, que la famosa tila alpina, en contra de lo que se suele creer, no es una variedad del árbol del tilo, sino una combinación de plantas- su composición más habitual consiste en espino blanco, flores de naranjo, hojas de menta piperita y hojas o flores de tilo.
Estres
Plantas adaptógenas
Las plantas adaptógenas son aquellas que actúan regulando las funciones fisiológicas y equilibrando nuestro organismo, de manera que ante las circunstancias de “alarma”, son capaces de ayudarnos para adaptarnos a esta nueva situación. Consiguen que podamos resistir situaciones de estrés que habitualmente afectarían el funcionamiento de nuestro organismo de manera negativa. No son estimulantes ni tampoco aportan un extra de nutrientes, simplemente actúan equilibrando nuestro organismo según su necesidad, aumentan la resistencia física y mental y regulan las funciones del organismo.
Algunos ejemplos de plantas adaptógenas serían por el ginseng asiático (Panax ginseng). el eleuterococo (Eleutherococcus senticosus) la raiz de la rhodiola (Rhodiola rosea) la maca y un hongo llamado reishi, un excelente antioxidante que proporciona bienestar al organismo y provoca que nuestro sistema inmunológico reaccione de forma más rápida
El insomnio
El insomnio es un trastorno del sueño común, que se basa en la dificultad para conciliar el sueño o mantenerlo, o de lograr un sueño reparador de calidad.
Puede causar somnolencia diurna y falta de energía, ansiedad e irritabilidad, dificultad para concentrase
en tareas, prestar atención, aprender y recordar. Al final como vemos todo es un círculo vicioso. Los tratamientos incluyen cambios en el estilo de vida – medidas higiénico dietéticas – hábitos de sueño, deporte, por supuesto hipnóticos, ansiolíticos, benzodiacepinas… Todos estos fármacos generan dependencia y la retirada ha de ser gradual.
Plantas que nos ayudan a conciliar el sueño y el descanso
La pasiflora
También conocida como la flor de la pasión, flor de Cristo o pasionaria (Passiflora edulis, Passiflora incarnata) es una atractiva planta originaria del sur de los Estados Unidos y México, trepadora que fue introducida en Europa por los jesuitas españoles que viajaron al nuevo mundo seducidos por sus atractivas flores en cuyos órganos decían ver los instrumentos de la pasión de Cristo con los clavos el látigo y el martillo; de ahí su nombre. Se cultivo como ornamental hasta el siglo XIX cuando se descubrieron sus propiedades somníferas, sedantes y antiespasmódicas, bien conocidas por los indígenas americanos.
Se utilizan las partes aéreas, las flores y las hojas, en infusiones de 20 – 30 gr de planta por litro de agua y se toman 2 – 3 tazas al día, incluso una más antes de acostarse. Contiene flavonoides y alcaloides indólicos en su zona aérea que son los responsables de los efectos sedantes e inductores del sueño. No se sabe exactamente cuales son los componentes responsables de su actividad, posiblemente la actividad de la droga sea debida a un efecto sinérgico de todos sus componentes Induce un sueño natural, sin que se produzca somnolencia o depresión, por eso puede ser incluso administrada a niños. Además la pasiflora actúa como un ansiolítico suave, sin riesgo de dependencia y adicción. Se utiliza sobre todo para casos de insomnio, ansiedad y despertares nocturnos.
Entre otros usos menos conocidos de la pasiflora, se ha utilizado en procesos de deshabituación de alcohol y drogas ayudando a sobrellevar el llamado mono, como tratamiento complementario ayudando a disminuir la frecuencia y la intensidad de las crisis epilépticas y para calmar diversos tipos de dolores y espasmos.
La dosis recomendada para adultos, cuando se administra como sedante es de 0.5- 2 g de droga, 3- 4 veces al día; 1.- 2.5 g en 150 ml de agua/ día en forma de infusión 3/ 4 veces al día.
Se considera carente de toxicidad, contraindicaciones o efectos adversos, a pesar de ello no se recomienda su empleo concomitante con fármacos sedantes de síntesis como las benzodiazepinas. Ante la falta de datos de su empleo durante el embarazo y la lactancia no se recomienda su uso sin control facultativo, y tampoco en niños menores de 12 años.
La amapola de California
La amapola de California (Eschscholzia californica Cham) es una planta de la familia de las Papaveráceas muy conocida y apreciada por los jardineros y aficionados a la jardinería del mundo entero. Se planta con mucha frecuencia en parques y jardines de ambientes cálidos, y cuenta con la ventaja de tener un largo periodo de floración. Como su nombre indica, es originaria de California, donde se la considera la flor del estado, así como la de otros estados vecinos; pero se puede encontrar de forma espontánea en algunos lugares de Europa, incluido nuestro país.
Es una planta de hermosas flores solitarias de pétalos anchos y color anaranjado o amarillo intenso. Con fines medicinales se cosechan las flores, en pleno periodo de floración.
La amapola de California es rica en diversos alcaloides isoquinoleínicos de hasta 6 tipos diferentes como la berberidina, la californidina, la sanguinarina, la protopina o la quelidonina, y contiene además glucósidos cianogénicos y flavonoides.
Se le atribuye una acción ligeramente hipnótica y sedante. Está muy indicada en casos de insomnio, favorece un sueño plácido y reparador. Comparte con la amapola común su efecto relajante y antiespasmódico, alivia los espasmos gastrointestinales asociados a situaciones de tensión nerviosa. Reduce también la taquicardia, los tics nerviosos, los episodios de irritabilidad puntual y los estados de estrés y ansiedad leve. Por otro lado, es útil para aliviar jaquecas y calambres musculares, y se considera un buen apoyo para evitar o reducir la hipertensión.
Para favorecer el sueño: mezcla casera – se mezclan a partes iguales amapola de California con otras tres plantas sedantes: la pasiflora, la amapola común y la melisa, más anís estrellado para endulzar. Se hierve apenas un minuto una cucharada sopera rasa de la mezcla por taza de agua y se deja reposar de 5 a 10 minutos. Su sabor se puede mejorar con miel de azahar.
Por su contenido en alcaloides está contraindicada durante el embarazo (puede ser ligeramente oxitócico) y la lactancia (pasan a la leche materna) y en niños y pacientes con glaucoma por su capacidad de inhibir la degradación de catecolaminas.
Posología habitual: infusión 2g/150 ml agua 3 veces al día. Polvo de planta 1- 1.5 g al día repartido en 3 tomas y extracto fluido 1- 1,w ml entre 1 y 3 veces por día
Muchos preparados fitoterápicos y productos naturales a base de plantas medicinales incorporan también melatonina, una hormona natural reguladora del sueño.
La depresión
El hipérico o Hierba de San Juan.
Se trata de la planta estrella para curar la depresión, considerada como un antidepresivo natural, tan eficaz que algunos lo consideran el perfecto sustituto del tratamiento farmacológico. Sus efectos sobre los estados depresivos son globales, desde combatir el insomnio hasta reducir la ansiedad pasando por mejorar considerablemente el estado de ánimo. En algunos países, como Alemania, los medicamentos que contienen extracto de hipérico se recetan y consumen mucho más que los antidepresivos clínicos. .
El hipérico o hierba de San juan (Hypericum perforatum) es una planta herbácea con flores de color amarillo dorado dotados de glándulas de color rojo negruzco. Los estambres son numerosos, largos y vistosos. Las sumidades floridas se recolectan cuando están en plena floración, que se suele dar desde finales de junio a septiembre.
Conocida desde la época griega y romana, se dice que su nombre deriva del griego hyperikon (sobre imágenes, por encima de una aparición), término que según algunos hace referencia a la propiedad que se le atribuía de hacer huir a los malos espíritus y las apariciones. También era creencia que para obtener estas virtudes mágicas del hipérico se debía recolectar en la madrugada del día de San Juan (en el solsticio de verano). El término perforatum se debe a que las hojas del hipérico se hallan repletas de unas pequeñas bolsas secretoras visibles a contraluz, que parecen pequeños orificios, dando a la planta un aspecto perforado. Su nombre común hace referencia a san Juan Bautista, decapitado a petición de Salomé, hijastra del rey Herodes. Se dice que el pigmento rojo de las hojas simboliza la sangre del santo.
La droga está constituida por las sumidades floridas que deben ser recolectadas en plena floración. Su composición química es muy compleja, destacando entre sus componentes, las naftodiantronas, principalmente hipericina y pseudohipericina, derivados floroglucínicos (como hiperforina, flavonoides, biflavonoides, xantonas, aceite esencial, taninos condensados en muy alta concentración, ácidos fenólicos, triterpenos, carotenoides y esteroles. Según la RFE la droga debe contener no menos de 0,08% de hipericinas totales expresadas como hipericina. Estos compuestos químicos las Naftodiantronas (hipericina y seudohipericina) son específicos de la especie, por lo que son utilizados como «marcadores» en la identificación y valoración química tanto de la planta como de sus extractos (la cantidad de hipericina varía ampliamente en las distintas partes de la planta, según las condiciones de crecimiento y según la época del año). Son compuestos de color rojo intenso que brotan de las flores al estrujarlas, razón principal de la antigua creencia en sus propiedades mágicas.
Tradicionalmente el hipérico ha sido muy utilizado como cicatrizante y vulnerario, ayuda en la curación de heridas, quemaduras leves, picaduras de insectos, espasmos musculares, ampollas, contusiones y esguinces. En el siglo XVI era conocida como la hierba de las heridas y, años más tarde, se popularizó como la hierba militar porque se empleaba en emplastos para acelerar la cicatrización. Hoy en día el aceite de hipérico sigue siendo muy apreciado por sus buenas propiedades cosméticas, Los flavonoides confieren al hipérico una notable acción antiséptica, astringente, antiespasmódica y cicatrizante. Sus propiedades antiinflamatorias, astringentes y antivirales han sido demostradas en diversos ensayos clínicos.
Sin embargo, en la actualidad su principal interés se debe a su efecto antidepresivo en uso interno en el tratamiento de episodios de depresión leve a moderada (adultos y mayores de 12 años) en ansiedad, terrores nocturnos y trastornos neurovegetativos asociados al climaterio. Ya en tiempos de Paracelso, se describía el hipérico como «árnica para los nervios» y se usaba en problemas psiquiátricos. A día de hoy, no se conoce con precisión cuál o cuáles son los compuestos responsables de la activ
idad del hipérico, aunque se considera que la hiperforina es uno de los principales responsables de la misma, pero parece ser un efecto sinérgico de varios de sus principios activos. Los extractos estandarizados fluidos y secos de hipérico han demostrado gran tolerabilidad y efectividad y una disminución de efectos secundarios frente a los antidepresivos habitualmente utilizados; algunos autores postulan al hipérico como un fármaco potencial en el tratamiento efectivo y seguro para niños con síntomas de depresión. Diversos estudios han demostrado que esta sustancia puede inhibir la acción de la monoaminooxidasa (MAO), una enzima que puede destruir la serotonina.
El aumento de los niveles de serotonina, un neurotransmisor, produce una sensación de mayor bienestar, mayor capacidad de concentración y mayor autoestima. En cambio, su disminución se relaciona con estados de tristeza y episodios depresivos.
A esta capacidad antidepresiva de la hipericina se suma el efecto relajante de la hiperforina, lo que lo convierte en el mejor recurso natural para aliviar depresiones leves, estados leves de ansiedad, terrores nocturnos, hiperactividad infantil y trastornos nerviosos asociados a la menopausia.
Como ocurre con otros antidepresivos, recordad que el efecto no se manifiesta hasta al menos dos semanas después de iniciarse el tratamiento. Como antidepresivo se suele recetar en cápsulas o comprimidos de 250 o 300 mg, en una o dos dosis diarias para los adultos.
En herbolarios y farmacias se pueden encontrar fórmulas mixtas que asocian el hipérico con otras plantas medicinales, como eleuterococo, avena, valeriana, ginkgo o pasiflora.A la hora de tomar hipérico se recomienda hacer tratamientos de tres a cuatro semanas para poder apreciar mejoría, que pueden alargarse a ocho si persisten los síntomas.
Contraindicaciones del hipérico: Tanto si se usa por vía tópica (aceite, cremas o ungüentos) o por vía oral (extractos, comprimidos), el hipérico puede provocar reacciones de fotosensibilidad. También se han descrito interacciones del hipérico con otros fármacos, se comprobó que su administración conjunta puede disminuir sus niveles plasmáticos y por ello reducir su actividad terapéutica. La administración oral siempre debe estar pautada y controlada por un especialista médico. Hace unos años la Agencia Española de Medicamentos advertía del riesgo de tomar hipérico por su interacción con otros medicamentos, como ciertos inhibidores de la receptación de serotonina (fluoxetina, sertralina, etc.), contraceptivos orales, etc. Estas interacciones con medicamentos podrían provocar una disminución de las concentraciones plasmáticas y una pérdida del efecto terapéutico de estos medicamentos.
Aromaterapia científica. Aceites esenciales relajantes
La aromaterapia es una de las formas más sencillas de aliviar trastornos como la ansiedad y el estrés. Disponemos de un gran arsenal de aceites esenciales tranquilizantes, otros facilitan la claridad, los que estabilizan las emociones y levantan el ánimo. Debemos recurrir siempre a aceites esenciales de calidad 100% puro y bio, quimiotipados y respaldados por estudios científicos. Mis dos preferidos:
Aceite esencial lavanda: Las sumidades floridas y las hojas de la lavanda (Lavandula angustifolia) son ricas en un aceite esencial muy completo en cuya composición destaca el linalol con propiedades sedantes y equilibradoras del sistema nervioso central y vegetativo. Se ha demostrado científicamente que puede bajar los índices de cortisol, llamada la hormona del estrés. Adicionalmente protege el aparato cardiovascular y es considerado como uno de los mejores aceites esenciales para ataques de pánico.
Ayuda a recuperar tu paz interior, muy necesaria en estos tiempos, y es sumamente efectivo en los momentos de inquietud. El aceite esencial de lavanda Aporta bienestar, tranquiliza, favorece la relajación y el sueño.
Aceite esencial de naranjo: el aceite esencial de la naranja dulce (Citrus sinensis) y del naranjo amargo (Citrus aurantium ssp amara) favorece la relajación del sistema nervioso y linfático. Facilita las digestiones para que no resulten pesadas. Su aroma está relacionado con el incremento de los pensamientos agradables en la mente y, por ello, se utiliza con regularidad en las terapias contra la ansiedad. Al inhalar su olor se crea una sensación de felicidad y relajación, lo que ayuda a disminuir la ansiedad y el estrés.
Podemos aplicar unas gotas en la almohada o el cuello del pijama antes de acostarnos, poner unas gotas en el difusor y dejar que relaje el ambiente 30 minutos antes de acostarnos. Mezclar unas gotas con aceite vegetal para dar un masaje aromático o aplicar directamente unas 3 gotas en la cara interna de las muñecas, en la planta de los pies o en el plexo solar.
No recomendados en los 3 primeros meses de embarazo ni en niños menores de 6 años.
Siempre consultar con un especialista en aromaterapia.
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